Esto escribió Kundera en La lentitud:
Imagina su ojo del culo. ¡Ah, ese ojo del culo desnudo junto a él y que él ha dejado escapar, escapar del todo! Que no ha tocado ni visto.
Esto habría escrito si fuera mujer:
Imagina su chino de un solo ojo. ¡Ah, ese chino de un solo ojo desnudo junto a ella y que ella ha dejado escapar, escapar del todo! Que no ha tocado ni visto.